En 1993, durante el proceso clasificatorio para la Copa Mundial de Fútbol de 1994, se produjo la división de Checoslovaquia en la República Checa y la República Eslovaca, por lo que el equipo checoslovaco terminó el torneo como el equipo de los Checos y Eslovacos. Posteriormente, esta selección se disolvió, dando origen a las actuales selecciones nacionales de fútbol de la República Checa y la de Eslovaquia.
Bajo el título de la República Checa, la selección nunca se ha podido clasificar para la cita del Mundial. Sin embargo, realizó una gran campaña en la Eurocopa, llegando a la final en la Euro 96 (perdió contra Alemania). Aquella selección estaba formada por jugadores como Kouba, Suchopárek, Hornák, Berger, Bejbl, Kuka, Némec y los todavía supervivientes de aquella selección Poborsky, Smicer y Nedved.
En la Eurocopa 2004, llegaron a semifinales perdiendo contra la sorprendente ganadora, Grecia con un gol en el descuento de la prórroga.
No ha cambiado mucho éste equipo checo. Con la que es la probablemente la generación de jugadores checos, aspiran a tener una actuación excelente en el que será su primer mundial.
Equipo sólido y compacto no exento de calidad, con jugadores desequilibrantes. El equipo acude a Alemania con: Cech (Chelsea), considerado como uno de los mejores guardametas del planeta. En la defensa las opciones son variadas manteniendo una sólida muralla defensiva como Grygera (Ajax), Jankulovski (Milán), Jiranek (Spartak Moscú), Mares (Zenit), Kovac (Spartak Moscú), Rozehnal (PSG) y Ujfalusi (Fiorentina).
En la media destacan jugadores como Galasek (Ajax), Jarolim (Hamburgo), Poborsky (Ceske Budejovice), Polak (Nuremberg), Plasil (Mónaco), Rosicky (Dortmund) Smicer (Burdeos) y Pavel Nedved (Juventus y Balón de Oro 2003 ), que renunció a jugar con la República Checa después de la decepción sufrida en la Eurocopa de Portugal, pero la irregular marcha de su selección en la fase de clasificación propició su vuelta.
En la delantera destacan jugadores contrastados a nivel europeo: Baros (Aston Villa), Heinz (Galatasaray), Jan Koller (Dortmund), Lokvenc (Salzburgo) y Stajner (Hannover).
En su grupo formado junto a Estados Unidos, Ghana e Italia, no deberían pasar problemas para llegar a octavos jugándose contra los rossoneros el primer puesto para evitar a los cariocas en 1/8º.
Su entrenador, Karel Bruckner ha hecho historia al clasificar a la República Checa para el mundial pudiendo ser el último suspiro de una generación impresionante de jugadores.
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