(As) Un grupo de empresarios, pertenecientes a la Comunidad de La Rioja, quiere adquirir la plaza del Valladolid. De consumarse la operación, que debería contar con el consentimiento de los propietarios del club, el equipo castellano descendería a Segunda B o Tercera y sería sustituido por el comprador (es indiferente la ciudad a la que pertenezca) en la categoría que deportivamente le hubiese correspondido participar la próxima temporada, es decir, en Primera División. Este hecho es posible tras la entrada en vigor del Acuerdo de Colaboración entre Liga y Federación firmado en julio del año pasado, según el cual "los clubes y SADS afiliados a la LFP podrán presentar la correspondiente autorización para proceder a la ocupación de la plaza que por méritos deportivos le pertenezca".La Comunidad Autónoma de La Rioja, mediante la gestión de estos intermediarios, está intentando acogerse a esta vía para poder inscribir un equipo de su región en esta categoría. Castellón y Málaga también han sido tanteados.
El plazo para presentar las ofertas concluye el 15 de mayo. Antes de que se consuma se tendrá que proceder a un tanteo "entre los clubes o SADS con mejor situación deportiva en la categoría del club comprador o en la inmediata inferior, quienes tendrán derecho a conocerla e igualarla, lo que implicaría su adjudicación". Con posterioridad, se creará una comisión, dependiente de la FEF, que determinará en qué división participará el club vendedor.
Por otra parte, el Ciudad de Murcia tiene la intención de llevarse el equipo a otra localidad para evitar la competencia del Real Murcia.
Tanto el presidente del Valladolid, Carlos Suárez, como algunos miembros del consejo de administración, han reconocido en círculos privados que existe la posibilidad de que el club tuviera que trasladarse o vender la plaza ante la precaria situación económica que atraviesa. El endeudamiento ronda los 28 millones.
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