(M) El Flamengo se ha impuesto en los penaltis al Botafogo tras empatar 2-2 y ganó el campeonato de Río de Janeiro, mientras que el Santos, de Vanderlei Luxemburgo, se hizo con el título en Sao Paulo al derrotar al Sao Caetano por 2-0.
El Flamengo y el Botafogo disputaron un encuentro vibrante ante unas 60.000 personas en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, que tuvo un clima de fiesta que no se veía hace años. Souza puso en ventaja al Flamengo en el minuto 52 y Juninho marcó para el Botafogo cuatro minutos después. El Botafogo pareció acercarse al título en el minuto 60, cuando Dodo anotó un golazo con una perfecta vaselina. El Flamengo sintió el golpe, pero poco a poco comenzó a recuperar terreno y empató el encuentro en el minuto 73, con un fuerte remate desde fuera del área de Renato Augusto. El tiempo reglamentario concluyó con el empate a dos goles, el mismo resultado del partido de ida, por lo que el título se tuvo que definir en los penaltis, donde se agigantó el portero Bruno, una muralla bajo los tres palos del Flamengo. Bruno contuvo dos penaltis y el Flamengo se impuso por 4-2 en la tanda, para desatar los festejos de la numerosa hinchada del equipo que está considerado como el más popular de Brasil.
En Sao Paulo, el Santos ganó con lo justo. El equipo dirigido por Vanderlei Luxemburgo había perdido por 2-0 en casa del Sao Caetano y una victoria por un marcador similar le garantizaba el título, por su mejor campaña a lo largo del campeonato. El camino hacia el segundo título consecutivo lo abrió Adailton, con un gol de cabeza en el minuto 24, pero a partir de ese momento el Sao Caetano cerró todas sus líneas y el segundo gol se convirtió en una misión casi imposible. Casi, porque en el minuto 81, Kléber hizo una brillante jugada individual por la banda izquierda y envió el balón hacia el centro, para que Moraes, también de cabeza, anotase el gol del campeonato, que el Santos ya había ganado el año pasado.
En Río Grande do Sul, la fiesta fue del Gremio, que se consagró campeón de esa región tras golear en su estadio Olímpico de Porto Alegre al Juventude por 4-1, con tantos de Tcheco (2), Diego Souza y Lúcio, y Gabriel por el equipo visitante. El partido de ida había terminado empatado (3-3), con lo que el Gremio es el nuevo campeón de Río Grande do Sul. En Belo Horizonte, el Cruzeiro se impuso por 2-0 al Atlético Mineiro, que pese a la derrota conquistó el campeonato de Minas Gerais porque en el partido de ida había goleado por 4-0.
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