(Efe) El Bayern de Múnich derrotó hoy, en la prórroga, por 2-1 al Borussia Dortmund en la final de la Copa de Alemania con dos goles del italiano Luca Toni que le dieron a los bávaros el primer título de la temporada. La victoria no fue tan clara como muchos esperaban y el Dortmund llegó a estar cerca de la sorpresa después de haber forzado la prórroga en el descuento del tiempo reglamentario. Al final, incluso, otra vez hubo algo de suerte para los bávaros, o un premio al oficio, pues el gol de la victoria llegó cuando el rival mejor jugaba.
Los equipos salieron al campo con dos actitudes completamente opuestas. El Bayern saltó al campo con intención de atacar y de poner muchos hombres cerca del área contraria cuando tenía la pelota en su poder.
La principal preocupación del Dortmund, en cambio, era la defensiva por lo que tenía sus líneas demasiado retrasadas y, cuando atacaba, muchas veces le faltaban hombres en la mitad contraria para poder crear situaciones verdaderamente peligrosas ante la portería de Oliver Kahn.
El Bayern logró quebrar la defensiva del Dortmund en el minuto 11 cuando tuvo la primera llegada clara que a la vez se convirtió en el primer gol. La jugada la inició el holandés Marc Van Bommel con un pase de 40 metros para el francés Franck Ribery que lanzó un centro a la mitad del área pequeña para que definiera el inevitable Luca Toni.
La jugada del gol no sólo fue la primera ocasión que tuvo el Bayern sino también la única clara a lo largo del primer tiempo y eso se debía ante todo a que los dos centrales del Dortmund, Robert Kovac y Christian Wörns, estaban desempeñando un buen trabajo ante Toni y Miroslav Klose.
No obstante, el Bayern tenía una superioridad óptica, copaba bien el campo contrario al atacar -casi siempre un hombre se ofrecía en cada banda y por el centro merodeaban Luca y Klose- y en la retaguardia controlaba bien los tímidos intentos ofensivos del Dortmund.
Oliver Kahn no tuvo que intervenir en el partido sino hasta el minuto 31, cuando paró sin dificultades un disparo desde fuera del área de Florian Kringe.
Más tarde se inició una especie de resurrección del Dortmund y, en el minuto 44, una buena jugada individual condujo a la mejor ocasión para el Dortmund pero Lucio se atravesó oportunamente en el remate intentado por Tinga.
La ocasión de Tinga fue una señal clara de que el Dortmund iba a levantar su rendimiento y lo levantó y durante la segunda parte se mostró como un equipo claramente más peligroso que en la primera.
Llegaron otras ocasiones, Florian Kringe tuvo tres, aunque también era claro que el Bayern también tenía las suyas y Klose estuvo a punto de sentenciar en dos oportunidades, con sendos remates de cabeza. En el minuto 78, Kovac sacó de la línea de gol un remate de Lukas Podolski.
Las ocasiones desperdiciadas le pasaron factura al Bayern en el descuento cuando en un saque de esquina el croata Vladen Petric, tras un saque de esquina y en un enredo que se produjo en el área bávara, logró el empate y forzó la prórroga.
El Dortmund empezó la prórroga anímicamente reforzado y se mostró dominante en la primera mitad. En el minuto 100, Oliver Kahn tuvo que enviar a saque de esquina, tras una gran estirada, una remate de media distancia de Kringe.
Sin embargo, cuando el Dortmund mejor jugaba, otra vez volvió a aparecer Toni. En el primer ataque del Bayern en la prórroga, Lucas Podolski soltó un remate sin dirección y a la mitad del camino se apareció el pie del italiano que dejó sin opción al meta Marc Ziegler.
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