El travesti, conocido como Andrea Albertino, acudió a una comisaría de la policía militar de Río de Janeiro para entablar la la denuncia, pero abandonó la misma a mitad de su declaración, informó la agencia Globo.
El jugador acudió a declarar a la comisaría y alegó que fue una trampa del travestido, según la información periodística.
Los hechos supuestamente ocurrieron en un motel de la zona oeste de Río de Janeiro, en la madrugada del domingo, horas después de que Ronaldo acudiera al estadio Maracaná para presenciar el partido entre Flamengo y Botafogo, correspondiente a la ida de la final del campeonato regional de Río de Janeiro.
Ronaldo está en Brasil recuperándose de una grave lesión de rodilla que lo mantendrá apartado de las canchas hasta comienzos de 2009.
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