El
Levante cerró ayer de una tacada dos nuevas incorporaciones para esta temporada.
Shota Arveladze y Miquel Robusté se convirtieron en nuevos jugadores granotas, dos refuerzos que llegan para apuntalar la delantera y el centro de la defensa. Dos hombres cuyos fichajes estaban bien encaminados, pero que se habían complicado en los últimos días. Una difícil situación que se pudo solucionar durante la jornada de ayer. Por un lado, y después de varios problemas,
Arveladze logró finalmente la carta de libertad del
AZ Alkmaar. Aunque el club holandés no parecía dispuesto a facilitar la salida del delantero georgiano, tuvo que acceder ya que es lo que le había prometido el verano pasado, cuando Shota ya estuvo a punto de comprometerse con la entidad azulgrana. En el caso de
Robusté, el central catalán ya aseguró la semana pasada en declaraciones a
Radio Valencia-Cadena SER que había firmado con el Levante, pero faltaba que se desvinculara del
Espanyol. El conjunto perico, tras conocer el interés granota, tasó al futbolista en 400.000 euros y los dos clubes han llegado a un acuerdo para el traspaso del zaguero.
También el Levante está dispuesto a hacer un importante esfuerzo para lograr el fichaje de
Pedro León. De hecho, emisarios de la entidad granota tienen previsto viajar hoy a Murcia para reunirse con los dirigentes del conjunto grana e intentan llegar a un acuerdo para el traspaso de la perla de la cantera del
Real Murcia. La negociación no se antoja nada sencilla, ya que Jesús Samper ha tasado a Pedro León en 3,5 millones de euros, una cantidad a la que el Levante no parece dispuesto a llegar. De hecho, el club granota podría alcanzar los 1,5 millones de euros, una cifra que el Murcia considera insuficiente, por lo que habrá que comprobar si es posible llegar a un entendimiento. De momento, Pedro León está en su domicilio, ya que el club grana le ha apartado del equipo y le ha concedido una semana más de vacaciones hasta intentar resolver su futuro. El futbolista ha insistido en los últimos días en su deseo de jugar con el Levante, con el que ya ha llegado a un acuerdo verbal para las próximas cuatro temporadas, una presión que espera que surta efecto para que el Real Murcia rebaje sus pretensiones iniciales y termine aceptando la propuesta que le llega desde la entidad de Orriols para hacerse con el centrocampista murciano.
El Levante cerró ayer de una tacada dos nuevas incorporaciones para esta temporada. Shota Arveladze y Miquel Robusté se convirtieron en nuevos jugadores granotas, dos refuerzos que llegan para apuntalar la delantera y el centro de la defensa. Dos hombres cuyos fichajes estaban bien encaminados, pero que se habían complicado en los últimos días. Una difícil situación que se pudo solucionar durante la jornada de ayer. Por un lado, y después de varios problemas, Arveladze logró finalmente la carta de libertad del AZ Alkmaar. Aunque el club holandés no parecía dispuesto a facilitar la salida del delantero georgiano, tuvo que acceder ya que es lo que le había prometido el verano pasado, cuando Shota ya estuvo a punto de comprometerse con la entidad azulgrana. En el caso de Robusté, el central catalán ya aseguró la semana pasada en declaraciones a Radio Valencia-Cadena SER que había firmado con el Levante, pero faltaba que se desvinculara del Espanyol. El conjunto perico, tras conocer el interés granota, tasó al futbolista en 400.000 euros y los dos clubes han llegado a un acuerdo para el traspaso del zaguero.
También el Levante está dispuesto a hacer un importante esfuerzo para lograr el fichaje de Pedro León. De hecho, emisarios de la entidad granota tienen previsto viajar hoy a Murcia para reunirse con los dirigentes del conjunto grana e intentan llegar a un acuerdo para el traspaso de la perla de la cantera del Real Murcia. La negociación no se antoja nada sencilla, ya que Jesús Samper ha tasado a Pedro León en 3,5 millones de euros, una cantidad a la que el Levante no parece dispuesto a llegar. De hecho, el club granota podría alcanzar los 1,5 millones de euros, una cifra que el Murcia considera insuficiente, por lo que habrá que comprobar si es posible llegar a un entendimiento. De momento, Pedro León está en su domicilio, ya que el club grana le ha apartado del equipo y le ha concedido una semana más de vacaciones hasta intentar resolver su futuro. El futbolista ha insistido en los últimos días en su deseo de jugar con el Levante, con el que ya ha llegado a un acuerdo verbal para las próximas cuatro temporadas, una presión que espera que surta efecto para que el Real Murcia rebaje sus pretensiones iniciales y termine aceptando la propuesta que le llega desde la entidad de Orriols para hacerse con el centrocampista murciano.
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