(As) El Deportivo tiene la impresión de que Joaquín Caparrós puede marcharse al finalizar la presente temporada. Desde hace varias semanas, las declaraciones del técnico utrerano sobre su futuro señalan al final de la Liga como el momento para tomar esta decisión. Sin embargo, Caparrós tiene contrato con el club blanquiazul hasta 2008, por lo que le quedaría todavía otro año más al frente del banquillo de Riazor. Esta circunstancia, y el escaso diálogo que existe entre presidente y entrenador, ha hecho que Lendoiro se ponga las pilas y ya esté buscando alternativas para el banquillo en caso de que Caparrós no continúe. El nombre que maneja el Depor es el de Marcelino, entrenador del Recreativo. El técnico asturiano, que está llevando una trayectoria inmaculada con un Recre que cogió en Segunda, dejará esta temporada el banquillo onubense y tiene varias ofertas de Primera.
Los avales de Marcelino son su trayectoria y su forma de entender el fútbol. Tanto en el Sporting como en el Recreativo se ha caracterizado por practicar un fútbol alegre, muy acorde con los gustos de Riazor. Además, Lendoiro tiene una magnífica relación con Eugenio Botas, agente de Marcelino, con el que ha hecho operaciones como la de Pandiani (Birminghan), Luque (Newcastle), Adrián (Oviedo) y varios futbolistas del Sporting a los que pretende el Deportivo.
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